Embutidos
Desde Flamenco Gourmet queremos ofrecerte una experiencia única, la de comprar embutidos online, y así poder disfrutar de todo el sabor que cuenta nuestra amplia selección de embutidos artesanales El Gorrilla, cuidadosamente elaborados para satisfacer los paladares más exigentes. En nuestra tienda de embutidos gourmet, encontrarás desde salchichones y chorizos hasta lomos y morcillas achorizadas, cada producto refleja la pasión por la tradición culinaria y la calidad inigualable. Únete a nosotros en este viaje gastronómico y disfruta del auténtico sabor que solo El Gorrilla puede ofrecerte.
Preguntas frecuentes:
Si no te encuentras especializado con la gastronomía española, te estarás preguntando, ¿qué son los productos embutidos? No te preocupes porque en Flamenco Gourmet te resolvemos esta incógnita. Los embutidos son aquellos derivados que son preparados con carnes autorizadas que pueden haber sido picadas o no, sometidas o no a procesos de curación, adicionadas o no de despojos comestibles y de grasas de cerdo, de productos vegetales, condimentos y especias y finalmente, introducidas en tripas de carácter natural o artificial.
Los embutidos suelen ser clasificados según su ingrediente principal por lo que los que existen son: embutidos de carne, embutidos de vísceras, embutidos de sangre y fiambres. Igualmente, esta clasificación puede variar, puesto que se pueden clasificar según otras categorías que pueden ser crudos, frescos, ahumados o escaldados. También pueden ser clasificados dependiendo de si son mezcla de ingredientes, si son puros, según su consistencia, su color, etc.
Así pues, los embutidos más conocidos y consumidos en España son: el chorizo, el lomo embuchado, el morcón, el salchichón, el fuet, la salchicha, la butifarra, la morcilla, la sobrasada, la longaniza gallega, la sabadeña, etc.
La mayoría de las personas creen que el embutido y el fiambre son dos productos iguales, sin embargo en Flamenco Gourmet os contamos cinco diferencias que poseen estos alimentos entre sí que te harán descubrir cómo son de distintos realmente.
En primer lugar, los embutidos se preparan mediante carne picada, es decir se utilizan distintas partes del animal a las que posteriormente se les añaden condimentos para darle un toque más de sabor. Por otro lado, el fiambre se crea a partir de derivados cárnicos, los cuales suelen ser de menos calidad y a ello se le añaden grasas, féculas y tejidos conjuntivos del animal.
En segundo lugar, para envolver los embutidos se utiliza piel de tripa de cerdo o en algunas ocasiones alguna tripa artificial comestible. Sin embargo, los fiambres son envueltos en plástico, el cual no es comestible.
En tercer lugar, los fiambres tienen un proceso de curación más rápido, puesto que solo se suelen cocer o asar, mientras que los embutidos necesitan más tiempo en su proceso de curación.
En cuarto lugar, si pensamos en la fecha de caducidad de cada producto, el embutido suele durar más que el fiambre.
Por último, el embutido es mucho más saludable que el fiambre, puesto que posee menor porcentaje de grasa.
Si te han entrado ganas de comer un buen embutido, pero quieres comer de manera saludable te estarás preguntando, ¿cuáles son los embutidos más saludables? Los embutidos que se encuentran en esta lista son el jamón ibérico, el jamón cocido y la pechuga de pavo o de pollo. Por otro lado, en la lista de los embutidos menos saludables se encuentran el salchichón, la mortadela o el chopped. Aun así, siempre puedes consultar las etiquetas de los productos para revisar la lista de los ingredientes y observar cuál es el más saludable. Desde Flamenco Gourmet te recomendamos que consumas aquellos embutidos que posean una mayor cantidad de carne y menos sodio, grasas saturadas y aditivos.
Seguro que te estarás preguntando el origen de esta delicia delicatessen como son los embutidos, pero ya estamos aquí nosotros para desvelarte esa incógnita. Lo cierto es que hasta que no empezó a utilizarse la sal como ingrediente en los platos en el año 3000 a.C, no podemos hablar de embutidos, puesto que a través de la sal fue cómo se comenzó a mantener la carne, es decir, mediante el salazón. El origen del embutido se dio fundamentalmente en Europa, aunque según la zona su origen fue diferente. En primer lugar, en la zona del Mediterráneo se comenzaron a elaborar los embutidos secos, ya que el clima favorecía su proceso de elaboración. Por otro lado, los embutidos cocidos comenzaron a elaborarse en el Norte de Europa, también debido a la temperatura, puesto que el frío podía conservar la carne durante un periodo más largo.
Así pues, la historia también menciona los embutidos en sus obras literarias como en la Grecia clásica, puesto que en ella se habla del jamón, del tocino y de los embutidos. De la misma manera, en el Imperio Romano se habla de embutidos como el botulus, el cual actualmente es un embutido muy típico en la provincia de León, pero bajo otro nombre que es el botillo.
Durante la Edad Media, se produjeron cantidades inmensas de embutidos y las matanzas comenzaron a tener bastante popularidad y fue así cómo a través de la tradición familiar se fue transmitiendo de generación en generación la forma de elaborar productos con carne.
Por último, con la llegada de la Revolución Industrial del siglo XIX y todo lo que supuso el desarrollo de la industria, se comenzó a mejorar el proceso de creación de los embutidos, puesto que se comenzó a saber de manera científica qué es lo que ocurría en la carne cuando se sometía a un proceso de cocción, elaboración o maduración. Esto permitió que se mejoraran las formas de elaborar embutidos, así como la creación de nuevos productos que tuvieran una correcta calidad higiénico-sanitaria, así como sensorial.
Para realizar un embutido solo necesitarás: carne picada, grasa, tripa para embutir y condimentos. Lo primero que se debe realizar es mezclar la carne con grasa, una vez esté picada, para crear así una masa uniforme. Asimismo, es necesario que la carne se encuentre casi congelada antes de picarse porque sino podrá tener un sabor extraño.
En segundo lugar, cuando la masa ya esté hecha es el momento de echar la sal y condimentar mediante pimentón, pimienta u otro condimento.
En tercer lugar, se debe dejar reposar la masa anteriormente elaborada en frío hasta que fermente. Este proceso es muy importante, puesto que en él se adquiere el sabor tan característico que poseen los embutidos.
En cuarto lugar, cuando la masa haya fermentado, es el momento de embutir. Para ello, se utilizan tripas de cerdo y de cordero y una máquina que facilita la tarea y además, consigue rellenar las tripas de manera uniforme.
Por último, se debe dejar secar el embutido y para ello, el embutido es llevado a secaderos con temperaturas muy elevadas para que así pierdan el agua y posean una mayor conservación. Cuando el producto esté completamente secado, es el momento de consumirlo o conservarlo en frío.